Una de las interrogantes que deberíamos resolver es ¿Cómo me ve Dios? Y podrían haber muchas posibles respuestas a esta interrogante: Es posible que ÉL me vea como un gusano despreciable, o tal vez me ve como un indigno y despreciable pecador, o quien sabe me ve como un hijo pródigo, o tal vez simplemente como un hijo….

Descubrir nuestra significancia a los ojos de Dios es una de las revelaciones más importantes y gratificantes que  podemos recibir. Porque nos libera para vivir la vida como una ofrenda gozosa para Él. 

Este es un tema aterrador para aquellos que están acostumbrados a mantener la "humildad" pensando en sí mismos con autocrítica y vergüenza. 

Aprender nuestra importancia, relevancia y valor es realmente vital en la vida. Cuando Jesús se reveló a Saulo en el camino a Damasco, Saulo vio el propósito por el cual había sido elegido. También vio lo que tendría que sufrir para cumplir su propósito. La trascendencia y relevancia de Saulo fue parte de la revelación recibida. Es clave notar que esto no le trajo orgullo ni independencia. Ver la importancia y trascendencia correctamente genera confianza y humildad.

Nuestra importancia y trascendencia está ligada directamente a Aquel que nos ha llamado. No es algo basado en nuestra bondad; está basado en la Suya. Si bien es cierto que estamos hechos a Su imagen, también es cierto que nuestra justicia es como trapo de inmundicia. Todo el mundo necesita un Salvador que pague el precio máximo por nosotros, para que podamos ser llamados la justicia de Dios. Ese es un gran cambio, hecho posible sólo y completamente por la gracia. 

Ver nuestra trascendencia, relevancia y valor sin aumentar nuestra confianza en Dios siempre genera derecho. Y el derecho nos aleja de la gracia, y la gracia es una verdadera piedra angular de nuestra fe. Todo el mundo anhela la importancia, relevancia. Y es sólo Jesús quien puede dar esto que la gente anhela, y eso en abundancia. Es costoso, invaluable y gratuito.

Pedro, el apóstol lo dejó establecido:

Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; 10 vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia”. 1 P. 2:9-10.

A medida que descubrimos quienes somos se empieza a producir un cambio en nuestro interior, de manera que dicha transformación produce otros frutos en nuestro diario caminar. El concepto asociado a la realeza es importante de ser asimilado.

Un hecho importante al respecto lo vemos en la vida del Rey Salomón. Es una frase simple en la que las Escrituras discuten el efecto de la bendición sobre la reina de Sabá: “Y el rey Salomón dio a la reina de Sabá todo lo que ella quiso, y todo lo que ella pidió, además de lo que Salomón le había dado conforme a la generosidad real. Entonces ella se volvió y se fue a su tierra, ella y sus sirvientes1 R. 10:13 LBLA.

La generosidad real es algo que creo que será cada vez más importante a medida que descubramos quiénes somos, por qué estamos aquí y cómo se ve la realeza desde la perspectiva de Dios. 

Salomón no le dio lo que le dio a la reina de Saba porque ella estuviera en necesidad. Dar para satisfacer las necesidades es el regalo más fácil de dar. Dar para apoyar la obra del ministerio también es fácil para aquellos que ven tanto el mandato de Dios como los resultados para la eternidad.

Pero, la generosidad real es el tipo de generosidad más raro y, en cierto modo, el más importante de todos, porque proviene del honor y proviene de una vida transformada. Este tipo de dar viene porque reconozco quién es la persona a la que le estoy dando. Por lo tanto, mi regalo es un regalo de honor. Y surge de saber quién soy.

Una vez comprendido quienes somos y porqué estamos aquí, debemos gobernar con corazón de siervo, y servir con corazón de rey.

 

Pr. Rafael Vargas

SUBIR
Shopping cart0
Aún no agregaste productos.
Seguir viendo
Abrir chat
Hola 👋🏻 ¿En qué podemos servirte?