Es interesante conocer la historia de cómo el pueblo de Dios termino siendo esclavizado en Egipto. Cuando Dios hizo su pacto con Abraham, le dijo 13 … Ten por cierto que tu descendencia morará en tierra ajena, y será esclava allí, y será oprimida cuatrocientos años 14…16…. Gn. 15:13-16. Dios le dijo a Abraham lo que habría de traer para su descendencia el pacto que acababan de hacer, 400 años de sufrimiento y aflicción en tierra extraña; entonces Dios sacaría a su pueblo del cautiverio y lo guiaría a entrar en los límites de la tierra prometida. Jacob, el nieto de Abraham tuvo un hijo llamado José, quien fue vendido como esclavo en Egipto. Luego de ello, Dios trajo una sequía sobre la tierra donde habitaban Jacob y sus hijos, misma que se tradujo en una hambruna y provoco que Jacob y toda su familia terminaran en Egipto con José. Los israelitas fueron establecidos en un lugar llamado Gosen, en Egipto y allí fueron favorecidos y prosperaron más que los egipcios, pero eso solo fue por un tiempo; con el transcurrir de los años, las cosas fueron cambiando.
Movámonos 400 años adelante. En ese tiempo, los israelitas eran esclavos de los egipcios y estaban siendo usados para construir ciertas estructuras de esa nación. Ex. 2:23-24 23 Aconteció que después de muchos días murió el rey de Egipto, y los hijos de Israel gemían a causa de la servidumbre, y clamaron; y subió a Dios el clamor de ellos con motivo de su servidumbre. 24 Y oyó Dios el gemido de ellos, y se acordó de su pacto con Abraham, Isaac y Jacob. Hubo un cambio de liderazgo en Egipto. Y el favor que tenía el pueblo de Israel fue eliminado, lo cual provoco que empezara una temporada de labor dura para ellos, acostumbraban hacer ladrillos para las edificaciones de los egipcios, pero los egipcios dejaron de proveerles la paja que usaban para hacerlos, haciendo que su labor se volviera más dificultosa. Dios estaba en esta situación. Era el tiempo perfecto para provocar un cambio de manera tal que el pacto que tenía con su pueblo se cumpliera a cabalidad y plenitud.
Te das cuenta, ¿Cuántas de tus situaciones son como esta? Dios usando estas duras situaciones en tu vida para que puedas alcanzar a producir a plenitud su promesa en ti. ¡El pueblo gimió!! Y el Señor que no está limitado ni circunscrito al tiempo, espera escuchar un sonido que provenga del tiempo. Entonces, de un solo salto, ÉL interviene, recuerda su pacto con nosotros, empieza a visitarnos y a darnos nuestro plan para ser liberados de aquello que nos esclaviza. En este caso, ÉL descendió y provoco que una zarza ardiera y no se consumiera. Ex. 3:2-4 2 Y se le apareció el Ángel de Jehová en una llama de fuego en medio de una zarza; y él miró, y vio que la zarza ardía en fuego, y la zarza no se consumía ….. Cuando Moisés va a ver qué pasa, en ese preciso momento Dios se le revela como EL YO SOY. En medio de tus circunstancias, ¿estas expectante que ÉL se manifieste en tu necesidad? ¿Estas dispuesto a dejar algunas de tus actividades para verlo y pasar tiempo de intimidad con Él?
Lo repentino a veces es difícil de ser entendido. Esto significa que, de una manera inesperada, algo sucede sin que nadie nos hubiera advertido que eso iba a pasar. Sea lo que fuere que provoca un evento “repentino”, es una sorpresa inesperada que sucede en nuestro camino. Si no estamos preparados para esta situación, no tenemos tiempo para prepararnos para ella. Lo repentino es difícil de entenderse debido al elemento sorpresa. Este crea en nosotros una respuesta emocional ante lo inesperado. A veces cuando estamos esperando “que Dios se mueva” nos cansamos de estar esperando; y cuando menos esperamos que ÉL se mueva, ÉL se mueve y nos lo perdemos.
La historia de la transferencia del manto de Elías a Eliseo es uno de los relatos bíblicos más equilibrados de lo que es un hecho repentino. En 1 Reyes 19, Elías recibe la instrucción del Señor de darle su manto a Eliseo. El encuentra a Eliseo en el campo y le lanza el manto sobre él. Esta experiencia viene a ser un punto de partida, el momento cuando Eliseo deja a su familia, su trabajo y empieza a seguir a Elías.
Todos los creyentes hemos experimentado lo mismo de una u otra manera. Dios generalmente nos revela sus intenciones para nuestras vidas, ya sea personalmente o a través de profecía usando a alguien más, y lo hace mucho antes de cuando tiene la intención de que ocurran. Cuando estas intenciones se tardan en ocurrir, muchos de nosotros nos sentimos confundidos. Abraham, recibió la promesa de tener a Isaac 25 años antes de que esta se cumpliese. También le pasó a David, él fue ungido para ser Rey de Israel 20 años antes de que se hiciera realidad. La frustración y la confusión se establecen porque este Dios intemporal no siempre se molesta en decirnos que lo que promete puede ser años antes del cumplimiento.
Siete años después que Elías encontrara Eliseo y le arrojara su manto encima de él, 2 Rey. 2:11 11 Y aconteció que yendo ellos y hablando, he aquí un carro de fuego con caballos de fuego apartó a los dos; y Elías subió al cielo en un torbellino. Eliseo había pedido una doble porción del espíritu de Elías. Elías le dijo que eso era algo que era muy difícil de hacerse, pero que, si lo seguía hasta el final, él podría recibir esa doble porción pedida. Cada relación subsiguiente intentó alejar a Eliseo de este camino. Inclusive Elías le animo a que se fuera en otra dirección. Sin embargo, Eliseo siguió a Elías hasta el final, él estaba presente cuando Elías fue raptado y llevado al cielo. Esto fue algo repentino. Después de siete años, de pronto ocurrió, y Eliseo recibió ambos, el manto de Elías y la doble porción de su espíritu. No te canses esperando y siguiendo lo que Dios te ha prometido, los hechos de fe pueden darse en cualquier momento. Tal vez hay un hecho repentino esperando por ti en este momento.
La clave para que Eliseo experimentara este hecho repentino fue que perseveró. Muchos de nosotros nunca llegamos a nuestro destino porque dejamos de perseverar. Tu simplemente tienes que seguir.
Pr. Rafael Vargas S.